25.9.07

Detalle

Amaneció, y el silencio era luz entrando como un ave por la ventana. En el silencio, tu respiración en mi piel brilló presencia, brilló momento y la habitación respiro suavemente, robándole todo el frío a la mañana.


20.9.07

Breve

Hay días en los que creo que caí por la ventana que abrieron cuando cerraron la puerta.


18.9.07

Casi

En la calle lo que queda del invierno forcejea entre viento y aroma de jazmines. Lo lamento. Ya lo siento sobre mi piel. Ya esta acá, dulce y suave en mi paladar. Casi lo siento, viento y humedad. Falta poco.

Lo siento invierno. El tiempo pasa.
Ya es tarde


16.9.07

Lean / Beban

Sed. Mucha sed. El agua entra por mis poros, abrazándome.
El calor es intenso, interno. Cierro los ojos y poco a poco el agua va cubriéndome, podría quedarme así hasta morir.
La suavidad da el paso, dejo que avance. Poco a poco el agua se agita, puedo verla acercarse al limite, la loza blanca brilla, el agua sigue su curva y cae, ruido y suavidad, hasta el piso. Como un pequeño mar, como sus olas, rebalsando la bañera, inundando el mosaico negro gris del suelo.
No es que le preste demasiada atención, pero las gotas al caer hacen un ruido maravilloso.
El mar se aquieta y la calma late. Unísono.
No se hace cuanto que estamos acá, pero se que podría amanecer mañana, rodeada de tu agua, helada, y no me importaría.
Mi piel se eriza y puedo ver el mar acercarse nuevamente.

Con la punta de los dedos, con la necesidad en la piel.
Se que la sed no va a dejarme. Necesito agua.


4.9.07

Momento

Camino del trabajo el cielo amarillo me anuncia tormenta.
Casi pegajosa oro y santafe. Sin los travestis no es lo mismo, perdió algo de autenticidad. Igual camino.
Quedan aun los restos de la bodega, el cadáver del tren.
La chapa esténcil, mural y casa. Sillas viejas, ropa colgada.
El viento quiere levantar, asota, el calor de temprana primavera es cada vez más húmedo.
Apuro el paso.
Colillas y papeles se arremolinan como hojas en esa esquina, las observo un rato. Al auto no le importa, se las lleva como latas de recién casados.
El hombre resignación recoge sus cosas. Mira al cielo mientras amontona detrás del colchón. Tiene la piel demasiado curtida, no hay diferencia, mañana el sol va a secarlo de nuevo.
Veo caer la primer gota. Impacta y se expande, el calor del suelo la consume lentamente.

Nubes sangran sobre mi ciudad, les dije cuanto me gusta?